Nadie ama lo que no conoce
El mundo animal en la Primera Infancia.
El mundo animal en la Primera Infancia.
A través de los animales y de su cuidado, los niños y en general todos los seres humanos, pueden aprender valores como la amabilidad, la compasión, el respeto, la afectividad, el amor, la incondicionalidad, la paciencia, la consideración y la bondad. Además, desarrollan hábitos empáticos con los seres que dependen casi que exclusivamente del ser humano, como los animales de compañía y los animales domésticos.
Este contenido se trabajará en todo el proceso educativo, no se dedicará una actividad específica con este fin. Cada momento educativo debe contener acciones planificadas para incentivar los sentimientos de amor y respeto por todo el entorno. Es un tema de gran importancia para el trabajo con la familia.
Desde las primeras edades se les familiariza con acciones directas con los animales más cercanos a su entorno con el fin de:
Desde la primera infancia se combate el maltrato animal, creando ciudadanos más conscientes del dolor y el sufrimiento y más conectados con el medio ambiente en general.
Tenemos que partir de la premisa que dice: “nadie ama lo que no conoce”. Por tanto, si queremos que los niños desarrollen amor, cuidado y protección en esta tarea, es importante proporcionar a los niños actividades que estimulen su amor.