Esta es una historia real, los niños agradecen el empeño de tantos maestros y trabajadores del ICRT, en mantener las «teleclases» o actividades docentes televisivas en tiempos de COVID-19. La historia nos llega a través de una amiga, a quien su vecina le pidió entregar este poema de su niña, que cursa el primer grado, para «la maestra de la televisión». Solo podemos dar las gracias por tanto cariño.