Con este título “Los malditos problemas del bloqueo”, la profesora Nancy
Lara, docente de la Secundaria Básica Alfredo Álvarez Mola de la ciudad
de Morón, en la central provincia de Ciego de Ávila, resume en una
investigación,  las incidencias que provoca ese engendro yanqui contra
el proceso docente educativo, durante  seis décadas.

“Es una investigación que comparto con los estudiantes, con las
intenciones de recoger en la mayor magnitud posible, las afectaciones
del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba en un sector priorizado y
estratégico como es la Educación”, confiesa la autora.

“Las incidencias no se limitan  solamente
a los problemas energéticos
que han obligado a la adopción de medidas como
extremar el ahorro en los
horarios picos, dejando a media luz las aulas en
pleno horario de
clases, o a  apagar computadoras, medio vital en el
aprendizaje, sino
que afectan otros muchos aspectos de manera colectiva y en
lo individual
  a cada estudiante y profesor”, explica esta
innovadora.

Se suman múltiples afectaciones, como la carencia de piezas
de repuesto
para mantener activa la base tecnológica, lo que obliga a la
realización
de innovaciones o a la búsqueda de soluciones prácticas y lo
inherente a
la base material de estudio, limitada por no contar  con la
materia
prima necesaria en los momentos requeridos.

Los malditos
problemas del bloqueo van más allá del límite de la
escuela, porque infieren
en situaciones sociales que  golpean con la
llegada puntual de los
escolares  a las aulas, como el transporte, las
roturas de hornillas en las
cocinas hogareñas, la falta de medicamentos
para aquellos casos que
requieren de tratamientos especializados.

Sobre la mesa de trabajo de la profesora Nancy Lara se acumula un número considerable de trabajos investigativos que  le han entregado sus
alumnos sobre visiones individuales de las afectaciones del bloqueo.

Refiere que desde la óptica del
estudiantado las afectaciones se hacen
sentir en el medio ambiente, en la 
salud, en la alimentación, en las
construcciones escolares, en las acciones
de reparación y mantenimiento
y  en los medios básicos.

Ante este
cúmulo de  efectaciones, el sector de la Educación en Morón
cuenta con un
movimientos que agrupa a más de mil innovadores en cerca
de 30 comités, los
que se encuentran en permanente batalla por minimizar
las afectaciones del
bloqueo de Estados Unidos contra la isla.

A ello se suma el accionar el
Grupo de Tecnología de la Educación,
firme  colectivo que trabaja porque
televisores, computadores y otros 
medios de enseñanza se mantengan activos
en función del proceso docente
educativo.